Este texto me ha hecho reflexionar, y mucho. Las de veces que me habré enfadado, porque las niñas han desparramado la harina por la casa, o han tirado el rollo del papel higiénico por el retrete para coger el tubo de cartón, o porque han pintado las paredes, se han customizado la ropa, han desmontado un mueble, cortado la luz, desconfigurado el ordenador, vaciar el bote "entero de gel" en la bañera para hacer baño de espuma, han coloreado el agua con tintes... "malas", mas mala seria yo que las enseñe ¿debo de quejarme ahora que lo intentan hacer por si mismas?
No hay comentarios:
Publicar un comentario